Carlos María Rodríguez de Valcárcel era el Gobernador Civil de Cádiz y Jefe Provincial del Movimiento. La catástrofe le sorprendió cuando regresaba navegando desde Bilbao a Cádiz, por lo que decidió desembarcar en el puerto de Lisboa para continuar el viaje más rápidamente por carretera en un vehículo prestado por el embajador de España en la capital portuguesa.
Presidió la Comisión Pro-Damnificados de la catástrofe y se volcó especialmente con las víctimas y sus familiares, llegando incluso a viajar expresamente a Ceuta para consolar a los padres de Jesús Gabriel Palma Ruiz, quien era uno de los marineros que custodiaba aquella noche el almacén de minas que hizo explosión.